(12/11/2018) Los consumidores y usuarios han otorgado la máxima calificación —cien puntos—, a cada uno de los aspectos que se analizan en el estudio de la OCU: aglomeraciones producidas, retrasos registrados en las pantallas informativas y retrasos reales sobre el horario del servicio.

Según lo que se desprende de esta valoración, las aglomeraciones son prácticamente imperceptibles o sobradamente aceptables, y no se detectan retrasos ni en el servicio comercial prestado, ni en la información que sobre el mismo se ofrece a los viajeros a través de las pantallas digitales existentes en los andenes de las estaciones.

Este nivel de satisfacción se refleja en el aumento progresivo del número de usuarios del metro de Málaga, que durante el pasado mes de octubre ha registrado el mayor número de viajeros/mes desde su puesta en servicio, con un total de 650.682 cancelaciones. En cuanto al crecimiento interanual, el metro de Málaga registró en el año 2017 el mayor crecimiento en términos relativos de todos los metros del conjunto nacional, con un 10 por ciento más de viajeros que en 2016.

En segunda posición en el estudio se sitúa el metro de Bilbao, con una nota de 88 puntos sobre 100, y en el tercer lugar empatan los suburbanos de Madrid, Palma y Sevilla, con 80 puntos sobre 100 cada uno.

La calificación otorgada a Metro de Málaga en este estudio viene a refrendar la obtenida a través de la encuesta de satisfacción a los clientes, anualmente realiza el metro malagueño y que pone de relieve el alto grado de satisfacción de los viajeros con el servicio comercial ofrecido por la compañía. A este respecto, en los tres últimos años de explotación comercial —2016, 2017 y 2018— las notas obtenidas han sido de 9, 8,9 y 8,7, respectivamente.

El metro, el medio de transporte público más puntual

Según los datos registrados en el estudio, el metro es, términos generales el mejor modo valorado en cuanto a puntualidad entre los diferentes medios de transporte público colectivo, tanto en lo que se refiere al horario anunciado en las tablas de la estación, como en los tiempos de espera que marcan los teleindicadores de las estaciones.

Por el contrario, no consigue una nota tan elevada el nivel de aglomeración de usuarios en determinadas ciudades, lo que, según la OCU, se traduce una insuficiente frecuencia de paso, sobre todo en hora punta.