(04/07/2018) Según los resultados de la Encuesta de Satisfacción Anual 2018, realizada por la empresa Dataestudios y Metro de Sevilla, La rapidez de llegada a destino y ahorro de tiempo, así como la comodidad, son los motivos fundamentales de los usuarios para viajar en el metro sevillano. Dichos resultados señalan que los viajeros están muy satisfechos con el servicio, al que valoran con 8,3 sobre diez, con lo que el suburbano repite la calificación obtenida en 2017 y que alcanzó por primera vez en 2014. La base de la muestra de este estudio la conforman 2.363 entrevistas realizadas a usuarios en el conjunto de las estaciones, entre los días 14 y 27 de mayo, y arroja un nivel de confianza del 95,5 por ciento con un índice de error de +/-2,1 por ciento.

El 98 por ciento de los usuarios encuestados valoran positivamente el servicio, de los cuales casi el 80 por ciento lo hace con puntuaciones entre ocho y diez, y tan solo un 0,4 por ciento de los encuestados lo puntúa por debajo del cinco. La confianza en el servicio también es muy elevada entre los entrevistados: el 98,8 por ciento declara que metro ofrece un servicio fiable.

Los aspectos que obtienen las valoraciones más altas son la fiabilidad del servicio y la limpieza de estaciones (8,9), el trato de los empleados y la sensación de seguridad (8,8). Por el contrario, los aspectos que obtienen menor puntuación son las aglomeraciones en andenes y trenes (7,7), la temperatura en los vagones (8,1) y la comodidad de conexión con otros medios de transporte (8,2).

En esta edición del estudio de satisfacción de usuarios destaca el hecho de que, de los dieciséis aspectos evaluados, doce superan la media global de 8,3 y catorce obtienen valoraciones superiores en comparación con las obtenidas en el estudio de 2017.

Perfil del usuario

Según los resultados del estudio, el perfil demográfico del usuario tipo de Metro de Sevilla es mayoritariamente mujer (62,7 por ciento), menor de treinta años (46,9 por ciento) y residente en Sevilla (42 por ciento). Los viajeros procedentes de otros municipios por los que transcurre la línea 1 suponen casi un 31 por ciento del total de la muestra, mientras que un 25 por ciento procede de otros municipios de la provincia.

En relación con la ocupación, la mitad de los usuarios de son trabajadores –concretamente, el 51 por ciento– y el 36 por ciento estudiantes, mayoritariamente universitarios. Estas variables están muy relacionadas con los motivos por los que se usa el metro y con la frecuencia de los viajes: el 65 por ciento de los encuestados realiza entre cinco y catorce viajes semanales, el 29 por ciento realiza menos de cinco viajes a la semana y el 4 por ciento realiza más de quince viajes semanales, siendo los principales motivos del desplazamiento el trabajo (42 por ciento), los estudios (29 por ciento) y el ocio (16 por ciento).

Seis de cada diez viajeros utilizan el metro desde hace tres o más años y el tres de cada diez lo usan desde que el metro empezó a prestar servicio en 2009. El incremento de nuevos usuarios también se refleja en este estudio, en el que se detecta que un 16 por ciento de los viajeros entrevistados empezaron a usar el metro hace menos de dos años.

Todos los perfiles de usuarios coinciden en que la rapidez de llegada al destino y el ahorro de tiempo (43 por ciento) así como la comodidad que les supone su uso (27 por ciento) son los motivos fundamentales por los que eligen el metro como medio de transporte frente a otras alternativas.

Respecto a las alternativas de transporte para los usuarios entrevistados, el vehículo privado sería el medio de transporte sustitutivo del metro casi en el 36 por ciento de los casos, mientras que el autobús urbano y el interurbano serían la alternativa para el 35 y el 20 por ciento de los entrevistados, respectivamente.

Hábitos de movilidad

En el estudio se refleja que el 62 por ciento de los usuarios llegan andando a la estación de origen de su trayecto en metro y el casi el 83 por ciento continua el viaje a pie al salir de la estación. Sólo un 23 por ciento de los usuarios entrevistados utiliza el vehículo para acceder al metro y un 7 por ciento lo hace para continuar el viaje una vez finalizan su trayecto.

En menor medida, los usuarios utilizan el autobús (urbano e interurbano) y la bicicleta para acceder al metro: el primero participa en un 10 por ciento en el acceso al metropolitano y un 7 por ciento en la dispersión y el último un 2 por ciento, tanto en el acceso como en la dispersión.